Encuentran vestigios arqueológicos en el predio donde se construirá un Wal-Mart en Tula de Allende en la colonia El Salitre, arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) son los encargados de realizar el salvamento.
Hasta el momento, se han encontrado 18 entierros humanos, además una zona habitacional y más de 100 piezas arqueológicas de gran importancia.
El proyecto, aprobado por el Consejo de Arqueología del INAH, es encabezado por los arqueólogos Luz María Roldán Olmos, Luis Manuel Gamboa Cabezas, Husein Alfonso Amador Palacios, Martha García Sánchez y Carlos Alberto Simón Pérez.
De acuerdo con el arqueólogo del Centro INAH Hidalgo, Gamboa Cabezas, el salvamento inició a finales de abril de 2023, cuyos hallazgos permitirán conocer el modo de vida de las personas que se asentaron en este humedal; lo significativo, indicó, es que los elementos culturales aparecieron a menos de cinco centímetros de la superficie.
En la primera, que corresponde a la época Tolteca, se localizaron en el interior de las habitaciones de la unidad residencial: entierros humanos, ollas, cuencos, cajetes trípodes y vasijas de tipo Plumbate, Cloisonne y Anaranjado Fino. Asimismo, núcleos y navajillas prismáticas de obsidiana; figurillas antropomorfas y zoomorfas; instrumentos de hueso, como agujas, punzones y raspadores; tlecuiles o fogones, malacates e instrumentos musicales, entre los cuales destaca un aerófono manufacturado con hueso humano.
La segunda etapa constructiva refiere a una superposición de elementos arquitectónicos que cubren la parte norte de la unidad residencial tolteca y fue realizada en la etapa Azteca (entre 1475 y 1522 d.C.); resalta la utilización de basalto careado y piedra bola que se manejó para la construcción de muros, además de la introducción de sistemas de desagües y pisos para tapancos.
Los materiales recuperados indican una fuerte interacción con la parte oriente de la Cuenca de México, en especial con la región acolhua, debido a la presencia de cerámica pintada en negro sobre rojo e incensarios calados con cabeza de serpiente; también hay contacto con el área de Cholula, por la identificación de jarras policromas; y con la zona norte de la Cuenca de México, ya que se recuperaron restos de vasijas salineras y cerámica proveniente de Tlatelolco.
La tercera etapa de ocupación corresponde a la Colonial Temprana (1522-1540), misma que se encuentra superpuesta con la Azteca. Aquí se rellenaron los cuartos prehispánicos para subir el nivel y ampliarlo hacia la parte noroeste con nuevas construcciones.
Entre los materiales hay cerámica mayólica azul sobre blanco y lebrillos vidriados de color verde, porcelana china, huesos que corresponden a las primeras especies que llegaron a la región de ganado vacuno, caprino, porcino y, quizá, caballo; a su vez, metales como cucharas y una hachuela.
Los objetos fueron llevados para su análisis a distintos laboratorios del INAH y a la Zona Arqueológica de Tula. Respecto a los vestigios de la unidad habitacional, quedarán protegidos por el INAH.
Los vestigios arqueológicos, serán cubiertos y tapados nuevamente con tierra, para construir encima un centro comercial.





