- Alcalde Fernando Pérez encabeza los trabajos para sofocar el siniestro
Intensa movilización de cuerpos de auxilio, policías y bomberos de 3 municipios se registró esta mañana luego de que un incendio consumió en su totalidad una bodega de abarrotes en la Central de Abastos de Tulancingo ubicada entre las calles Corregidora y Rayón.
En su carácter de presidente del Comité de Protección Civil, el alcalde Fernando Pérez Rodríguez coordinó y participó en el dispositivo para sofocar la conflagración en la bodega Pifsal.
El reporte del incendio se recibió a las 5:30 horas de este sábado vía C4 e inmediatamente bomberos de Tulancingo acudieron al lugar e iniciaron el combate del fuego que se podía percibir a varios kilómetros a la redonda, policías municipales acordonaron el lugar para permitir los trabajos.
Cabe mencionar que pese a ser un incendio de grandes proporciones, no hay registro de pérdidas humanas y se hizo presente la capacidad de reacción de los cuerpos de auxilio, la cual fue vital para evitar que el incendio se propagara y se generará algún tipo de tragedia.
Al conocerse la magnitud del incendio, se hizo presente la solidaridad y coordinación interinstitucional, un total de 50 elementos participaron en el control de incendio, incluyendo bomberos y policías de Tulancingo, Cuautepec y Santiago Tulantepec.
De acuerdo a las autoridades, se utilizaron al menos 60 pipas de agua para atender el siniestro, se destinaron 5 carros bomba y equipo especializado.
La Dirección de Tránsito acordonó la zona para proteger la integridad de personas que se acercaron al lugar r y por parte de Seguridad Pública se despejo el área para no entorpecer las labores de atención al incendio.
Fue a las 10: 30 de la mañana cuando, el incendio fue controlado, las llamas consumieron en su totalidad una bodega donde se almacenaba vinos, galletas, papel de baño, periódico y diversa mercancía del giro de abarrotes además de 4 camiones que se encontraban en el lugar.
Una vez controlada la conflagración, continuaron las tareas de remoción para cerciorarse que no quede posibilidad de que resurja fuego por alguna braza.
Se informó que el propietario de la bodega, tenía asegurado el negocio y deberá de atenderse el procedimiento correspondiente aunado a los dictámenes por parte de peritos de la Procuraduría para conocer la causa que propicio la conflagración en la que se calculan pérdidas materiales millonarias.