Luego de asumir la gerencia de Linconsa en Hidalgo, Ernesto Vázquez Baca, señaló que uno de los principales compromisos será el de incrementar el Padrón de Beneficiarios, especialmente en la región de la Huasteca, donde se ubican los municipios con mayores problemas de alimentación y nutrición.
El director general de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, dio posesión al nuevo funcionario de la empresa sectorizada de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), y resaltó la importancia de renovar las gerencias estatales, para dar cumplimiento a los lineamientos que en materia de combate al hambre y a la pobreza dictó el Presidente Enrique Peña Nieto.
Destacó la importancia de la presencia del Programa de Abasto de Leche Industrializada en las comunidades y en los sectores poblacionales donde el hambre es un lastre que lastima, con el cual hay que terminar.
Destacó que los trabajos de Liconsa se enfocarán en abatir la carencia alimentaria, poniéndose como meta incrementar en 50 mil el número de beneficiarios a corto plazo, para sumarlos a los 103 mil que actualmente atiende el programa en Hidalgo.
Ante la delegada de la Sedesol en el estado, Patricia González Valencia; el director de Desarrollo Social de Pachuca, Cristian Guevara, y del delegado de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), Daniel Jiménez, el director de Liconsa tomó la protesta de ley a Ernesto Vázquez Baca como gerente de Liconsa en Hidalgo.
El nuevo funcionario federal recordó que Hidalgo tuvo la primera lechería de la paraestatal y resaltó la importancia histórica que reviste, porque “Hidalgo y México necesitan de Liconsa.”
Explicó que más de 11 mil ciudadanos viven en condiciones de carencia alimentaria dentro del territorio que enmarca cinco de los 84 municipios del estado, por lo que es importante incrementar el padrón de beneficiarios para cumplir el mandato del Presidente de la República.