“Los policías de Tepeji mataron a mi hermano, tenían un retén y al hacerle el alto no se detuvo, inmediatamente le dispararon”, así lo narró Noé Portillo González hermano del joven de 32 años asesinado la noche del viernes por policías municipales de Tepeji.
El joven viajaba a bordo de una camioneta, había salido de su casa ubicada en la comunidad de Golondrinas, un kilómetros delante de donde perdió la vida, en la comunidad vecina de Santa María Quelites, policías municipales de Tepeji colocaron un retén y el joven no se detuvo al momento que le marcaron el alto, “fue cuando el dispararon en varias ocasiones”, dijo su familiar.
Los disparos impactaron en la cabeza del joven, quien se ganaba la vida manejando una combi de la ruta Pilgrims-Cbtis, en la comunidad de Tlaxinacalpan.
El chofer murió prácticamente al ínstate y su camioneta quedó a un costado de la carretera.
Al lugar arribaron patrullas de la policía municipal y una ambulancia de protección civil ya que el primer reporte señalaba que fue un accidente vehicular.
La zona se llenó de policías, a decir de los vecinos, los policías intentaron encubrir a sus compañeros, “elementos de la policía no daban datos de quién había disparado, no querían”, dijo, por lo que la población comenzó a lanzar piedras a las unidades, posteriormente les rociaron gasolina y les prendieron fuego a tres patrullas y a una ambulancia.
Sin embargo un paramédico logró rescatar la ambulancia y metros adelante logró apagarla y llevarla solo con algunos daños a la base.
Las tres patrullas quedaron reducidas a cenizas y fierros retorcidos.
Primero, la multitud no permitía que las unidades se las llevaran, debido a la falta de garantías y el servicio médico forense tardó en ingresar a la comunidad.
Al lugar arribo Óscar González secretario del ayuntamiento quien diálogo con los familiares anunciándoles que los 4 elementos que estaban en el retén fueron detenidos y puestos a disposición del ministerio público para que investigue el caso.
Así también, se acordó tener una reunión durante la madrugada con el edil de Tepeji Moisés Jiménez, con estos acuerdos se logró que el SEMEFO levantara el cuerpo sin vida y durante el transcurso de la mañana retiraron la camioneta baleada y las patrullas calcinadas.
Noé Portillo pidió justicia por la muerte de su hermano.
