Con los primeros rayos de Sol, salen los habitantes para organizar “el desfile de los mecos”, personaje del cual se caracterizan desde pequeños hasta los de edad avanzada entre la población que mantienen viva la tradición del nanahuatilis.

El primer día en el Carnaval hay actividades que por tradición desde la época prehispánica siguen presentes, siguen manteniendo la esencia del enigmático nanahuatilis, conmemoración que luego de ser mestizada actualmente es conocida como Carnaval.

Es el mediodía; la banda de viento sigue tocando algunos ya se encuentran con el rostro pintado al igual que muchos de los que son partícipes de esta tradición de muchos años, quizá ninguno recuerda cuántos.

Todos se preparan para el recorrido por las principales calles de la población pasando por la presidencia municipal, la cual desde muy temprano luce decorada para la celebración con distintos colores.

Al ritmo de la música de viento, los contingentes de mecos caracterizados con tepetate y pinturas vegetales son vistosos y llaman la atención de lugareños y visitantes; conocedores de la tradición, la mayoría colabora con las actividades de esta fiesta.

La presidenta municipal, Teresa Flores Nochebuena se involucra en las fiestas del pueblo y destaca la importancia  de mantener vivas las tradiciones que dan identidad a las personas y que en Atlapexco se mantiene la convicción y el júbilo para que persistan las actividades tradicionales.

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