Tras asegurar que no dejará el cargo como presidente municipal de Cuernavaca, el ex futbolista Cuauhtémoc Blanco Bravo puntualizó que los señalamientos de homicidio en su contra le dan fuerza para mantenerse firme y en pie de lucha contra las injusticias.
Además aseveró que teme por su vida y la seguridad de su familia, pues advierte que su presencia le resulta incómoda al gobernador de Morelos, Graco Ramírez Garrido Abreu, a quien señala de manejar todo en la entidad, por lo que desconfía de las autoridades locales.
Blanco Bravo expuso que las autoridades locales “ya están jugando muy mal” en este caso y reiteró su deseo de que la Procuraduría General de la República (PGR) atraiga el caso por completo y no sólo coadyuve en las indagatorias con la Fiscalía General de Morelos.
Muy a su estilo Cuauhtémoc Blanco dijo desconocer quién está detrás de las acusaciones como autor intelectual del homicidio del empresario Juan Manuel García Bejarano, quien tenía la concesión de la feria local, y se autodenominó como “un chavo que siempre ha luchado”.
Ante la declaración del regidor Jorge Dada Guerrero, de que el deportista debe dejar el cargo como alcalde de Cuernavaca para enfrentar los cargos que le señalan, el edil comentó “ya estoy en el ruedo, ya no puedo salirme porque sería fallarle a la gente”.
Cabe recordar que por su parte el padre de la víctima del homicidio le ha exigido al gobierno de Morelos que presente pruebas de los señalamientos que hace, pues en las imputaciones acusa una presunta relación de su hijo con el crimen organizado, lo que propició el homicidio del joven empresario, señaló en su momento el Ejecutivo Estatal.
